Roberto Silva Bijit
Ha pasado el tiempo y la decisión gubernamental sobre la construcción de la central termoeléctrica “Los Rulos” en Limache sigue pendiente.
Por muy alerta que se encuentre la comunidad, los últimos meses se han prestado para confusiones y como dice el refrán, podría pasar que “a río revuelto, ganancia de pescadores”. Después del estallido social y ahora con la pandemia atacando, el tema de la central pasa a un segundo plano, lo que abre un espacio para que los inversionistas extranjeros puedan seguir avanzando en este contaminante proyecto que generará complicaciones a toda la zona.
Lo que la gente quiere es que no se construya la central. Lo han dicho en decenas de marchas, en foros y encuentros, en cartas y declaraciones, en letreros y entrevistas.
Los alcaldes de Limache y Villa Alemana han sido categóricos en plantear a nombre de sus comunidades, el total rechazo a la idea de instalar en medio del valle una central contaminante.
El alcalde Limache, Daniel Morales, ha sido insistente al señalar en reiteradas oportunidades que la instalación de la termoeléctrica no va con el proyecto de ciudad que se han trazado, que no puede ser viable aceptar esa industria en la comuna y que se han opuesto desde hace mucho tiempo a su construcción. También se pronunció en contra el alcalde Concón, Oscar Sumonte.
En la misma posición se encuentra el alcalde de Villa Alemana, José Sabat, quien ha sido enérgico al condenar la propuesta de instalación de una termoeléctrica contaminante y ha presentado importantes recursos legales al Tribunal Ambiental para impedir que le sean otorgados los permisos a Los Rulos. Es más, públicamente ha expresado su confianza en que se invalidará el permiso que se le otorgó a la industria por parte de la Comisión de Evaluación Ambiental.
El alcalde villalemanino presentó un recurso de casación ante la Corte Suprema, que antes ya habían presentado ante el Tribunal Ambiental, que acogió el recurso y lo trasladó a la Corte Suprema.
Lo que viene ahora es esperar el fallo del máximo tribunal chileno pronunciándose sobre los argumentos de fondo que dio la Comisión de Evaluación Ambiental y se espera que en esta instancia sea invalidado el acuerdo de aprobar su construcción.
En todo caso, todavía queda al Consejo de Ministros, entidad política que deberá pronunciarse en forma final para aprobar o rechazar la termoeléctrica que viene a contaminar la zona, y ahí, en esa instancia, lo más probable es que el gobierno rechace su aprobación y suspenda su construcción, tal como desde hace años lo viene pidiendo la gente a través de marchas y manifestaciones, o como lo han pedido los propios alcaldes de las diversas comunas de nuestro entorno.
Hay que recordar que hace un par de años los vecinos agrupados en “Villa Alemana sin Termoeléctrica” entregaron en la Intendencia Regional más de mil cartas rechazando su instalación y pidiendo que se cumpla la Constitución, cuando señala que todos tenemos “derecho a vivir en un medio ambiente libre de contaminación”.
Definitivamente NO a Los Rulos, que por más que ha movido dinero e influencias, deberá dejarnos tranquilos y sin su pesada contaminación.
