Debido a la gran concurrencia, los organizadores piensan realizar versiones mensuales
LA LIGUA.- Debido a que con el paso de los años tanto los Fiat 400 como los Fiat 600 se convirtieron en clásicos de la automovilística por haber marcado tantas generaciones, la Asociación Automovilística de La Ligua dispuso organizar una exposición de estos modelos para revivir tradiciones y ofrecer un panorama innovador a todos los habitantes de la comuna.
De esta manera, el pasado fin de semana se llevó a cabo la ExpoFito 2019, la cual fue todo un éxito, pues al lugar asistieron cerca de 500 personas y un total de 35 participantes de distintas comunas, tales como San Felipe, Los Andes, Illapel, Salamanca y Quilpué, entre otros.
Francisco Almeras, uno de los organizadores del certamen y parte de la Asociación Automovilística liguana, comentó que “no esperábamos tanta convocatoria. Fue realmente un éxito y se formó un ambiente muy familiar. Aparte de que llegó gente de muchos lados”.
Otro de los puntos positivos es que no ocurrieron mayores accidentes, debido a que la pista -si bien hay curvas y detalles mínimos que mejorar- se encontraba en buenas condiciones. “Hubo autos que tuvieron que desertar de la competencia por razones ajenas a las nuestras. A veces, también teníamos que mojar algunas curvas para afirmar la tierra, pero por el calor duraba máximo 30 minutos húmedo” detalló el organizador, agregando además que en el momento, fue captando las impresiones de cada uno de los participantes llevándose consigo sólo comentarios positivos.
“De todos los participantes, incluso un Club de Fito proveniente de Quilpué nos felicitó por la competencia que realizamos y nos dijeron que ojalá se repitiera. Comentarios como esos nos hace hoy decidirnos por querer seguir con esta competencia que revive tradiciones y cada vez más ir mejorándola. Si ahora convocamos 500 personas, la próxima vez ojalá sean más” agregó Francisco.
Es así como la Asociación Automovilística de La Ligua decidió que esta competencia se lleve a cabo de manera mensual. “Lo mejor de todo es que resultó todo muy familiar. A pesar del calor, que en la oportunidad habían cerca de 30 grados, las personas vinieron igual, y eso nos dejó sumamente satisfechos” finalizó Almeras.
